Las varices son venas dilatadas y desestructuradas de forma permanente, que no cumplen su función de retorno venoso, por lo que aumenta la presión en su interior. Habitualmente se localizan en las extremidades inferiores. Pueden aparecer en cualquier zona de las piernas o muslos, pero son más frecuentes en la parte interna y posterior.
Según los últimos estudios epidemiológicos, un 30% de la población general tiene varices. Los datos son mucho más elevados cuando hablamos de “arañas” vasculares, denominadas correctamente telangiectasias y varices reticulares.
¿A qué edad suelen empezar a aparecer las varices? Es muy variable, dependiendo de la carga genética puede ser de forma muy temprana. De hecho, las varices con más rápido desarrollo suelen aparecer en la juventud. También se sabe que a medida que avanzamos en la edad el riesgo de que aparezcan varices aumenta.
Los síntomas típicos son la pesadez, el cansancio, el dolor y el edema, que los pacientes suelen referir como hinchazón de tobillos. Habitualmente estos síntomas y signos se van agravando a lo largo del día cuando las piernas se sobrecargan de sangre y aumenta la presión en el interior de las venas.
Las medidas posturales, evitando estar mucho tiempo de pie, haciendo un ejercicio moderado y utilizar medias elásticas en profesiones de riesgo son las medidas más eficaces en la prevención. Desafortunadamente, hay personas con una gran carga genética que desarrollarán varices a pesar de una prevención adecuada.
¿Las varices se heredan?
La herencia es determinante. Se sabe que tener un progenitor con varices hace que en un 40% sus descendientes desarrollen varices. Si son los dos progenitores, la probabilidad de desarrollar varices está por encima del 60.
Existen otros factores relacionados con el sedentarismo o estar mucho tiempo de pie. Hay profesiones especialmente de riesgo para desarrollar varices: dependientes de comercio, peluqueros, camareros, entre otros y a estos factores se asocia la obesidad, que dificulta el retorno venoso.
La toma de píldoras anticonceptivas y alteraciones hormonales en la mujer se relacionan también con la aparición de varices. Por otro lado, un 40% de las mujeres embarazadas desarrollarán varices por un aumento de la presión en el interior de las venas, y por los cambios hormonales del embarazo. De hecho, de diez personas con varices entre seis y siete son mujeres.
Después del parto hay una mejoría de los síntomas y el aspecto de las varices suele mejorar, pero habitualmente siempre quedan algunas, es muy difícil que desaparezcan totalmente, salvo las que ocurren en la zona vulvar, que suelen desaparecer de forma mayoritaria.
Diferencias entre ‘arañas vasculares’ y varices
Habitualmente, se diferencia entre las várices propiamente dichas y las “arañas vasculares”. Están emparentadas, pero no son lo mismo. Las “arañas” se denominan de forma correcta telangiectasias y varices reticulares. Muchas veces se encuentran juntas en la misma persona y ambas forman parte de la misma enfermedad, pero su repercusión es diferente. Las varices se pueden complicar y las telangiectasias, normalmente, no. Casi todas las varices suelen tener síntomas.
Las personas consultan por ‘arañas’ por un motivo estético, pero no solo es estética, en muchos casos se asocia pesadez de piernas. En todos los casos, ‘arañas’ incluidas, hay que hacer un estudio con un eco-Doppler para hacer un buen diagnóstico antes de tratarlas”.
¿Las varices siempre progresan?
En general, sí. “Las varices son la manifestación más frecuente de una enfermedad crónica. Nos suele acompañar toda la vida. Esta enfermedad venosa crónica puede ir desde la existencia de pequeñas varices, al extremo de mayor gravedad, que es la aparición de las úlceras. No todas las personas con varices hacen úlceras, pero se debe aplicar un tratamiento correcto para evitar que progresen a fases más graves.
Con el calor las venas se dilatan y acumulan más sangre, y por lo tanto, más presión en el interior y más molestias. Además, el verano es una época del año en la que las varices progresan más.
¿Cómo se tratan?
Para hacer un correcto tratamiento hay que empezar con un preciso diagnóstico. La exploración especializada por excelencia es el eco-Doppler. En toda persona con problemas de varices se debe recomendar un tratamiento para mejorar los síntomas y prevenir la progresión y evitar complicaciones.
Los pilares básicos del tratamiento son:
- Medidas posturales, intentando evitar estar mucho tiempo de pie o sentado sin moverse.
- Medias elásticas (disminuyen la presión de las venas). Una correcta talla y compresión garantizan confortabilidad y eficacia en la eliminación de síntomas y en la prevención de nueva aparición de varices.
- Medicamentos flebotónicos. Son medicaciones eficaces para combatir los síntomas de las varices, solos o en combinación con las medias elásticas.
- La cirugía y la escleroterapia han experimentado un gran avance en los últimos años con incorporación de nuevas técnicas poco invasivas. La selección de los pacientes candidatos a cirugía debe realizarla un especialista en Angiología y Cirugía Vascular. En la mayoría de las ocasiones, la cirugía puede eliminar las varices por completo. Los diferentes tratamientos tienen diferente eficacia y diferentes resultados a largo plazo.
Otros consejos para convivir con varices
- Visitar al especialista en Angiología y Cirugía Vascular.
- Poner las piernas en alto y evitar estar quieto.
- Utilizar las medias elásticas siempre que sea posible.
- Tomar la medicación prescrita de forma regular.
- En el embarazo, utilizar medias e intentar descansar con las piernas en alto y sobre el lado izquierdo.
Qué debe evitar si tiene varices
- Vida sedentaria.
- Ropa poco adecuada. No usar prendas que puedan hacer un efecto liga.
- Controlar el sobrepeso y evitar la toma de anticonceptivos orales, si se pueden sustituir.
- Huir de las fuentes de calor excesivas.
