Investigadores del Instituto de Ingeniería de Procesos (IPE) de la Academia de Ciencias de China y de la Universidad de la Academia de Ciencias del país asiático desarrollaron una nueva formulación basada en plaquetas que ha demostrado potentes efectos terapéuticos contra el cáncer en modelos murinos, según publican en la revista Science Advances.
Los científicos utilizaron las características de agregación y activación de las plaquetas para abordar los problemas de focalización tumoral y penetración intratumoral. Al llevar nanopartículas fototérmicas e inmunoestimuladores, esta formulación biomimética también consigue una terapia combinada eficaz contra múltiples tipos de cáncer.
Recientemente, la terapia fototérmica (TFT) ha atraído una atención creciente. Aunque es prometedora, su administración eficiente sigue enfrentándose a una serie de problemas. La acumulación de fotosensibilizadores, específicamente en los sitios del tumor, y la subsiguiente penetración intratumoral están restringidas para la mayoría de las terapias anticancerígenas, debido a la heterogeneidad de la enfermedad y a la compacta matriz extracelular.
Como nuevo tipo de vector de entrega, las plaquetas han demostrado capacidad para transmitir la carga a los sitios del tumor a través de varios mecanismos, lo que sugiere que son candidatos razonables para la orientación del tumor y la penetración intratumoral.
La hipertermia puede inducir a las células tumorales a liberar antígenos. Esta respuesta no sólo revela la relación inherente entre los mecanismos subyacentes de la terapia fototérmica y la inmunoactivación, sino también fomenta la combinación de la primera y la inmunoterapia para mejorar el tratamiento contra el cáncer.
En esta nueva formulación, las nanopartículas fototérmicas y los inmunoestimuladores se integraron de forma sencilla, suave y eficiente en las plaquetas.
“La eficiencia de conversión fototérmica de esta novedosa nanopartícula fototérmica alcanzó 69.2 por ciento. Así, la irradiación de luz infrarroja cercana (LIC) de baja potencia puede generar suficiente hipertermia local”, afirma Tian Zhiyuan, de la universidad mencionada.
Las plaquetas biomiméticas funcionaban de centinelas circulantes en el torrente sanguíneo y tenían una respuesta sensible al daño vascular. Como resultado, una parte actuó como punta de lanza para cebar la adhesión en las células endoteliales vasculares defectuosas del tumor.
Tras la irradiación con LIC de baja potencia, la hipertermia local provocó un daño vascular agudo, que posteriormente indujo una cascada de agregación de las plaquetas reforzadas para formar un arsenal de puntería in situ.
Posteriormente, se generaron proplaquetas de tamaño nanométrico (nPLT) sobre estas plaquetas activadas. “Observamos que estas últimas transmitían la carga al tejido tumoral profundo, ampliando el área de ataque”, señaló Wei Wei, del IPE.